martes, 7 de diciembre de 2010

Tal vez sea muy cruel.... pero es la verdad


No hay nada mas hermoso que la unión que se da entre una madre y su hijo/a; desde el momento que está en su interior, dándole todos los cuidados necesarios y cuando lo tiene en sus brazos por primera vez, para entregarle todo su amor y cálidez.
Es quien te guí, alienta y apoya para dar los primeros pasos; quien se siente orgullosa con cada una de tus victorias y trata de dar todo de sí para que nunca te sientas defraudado ni nada por que ella es super.... tu madre la mujer más maravillosa. Que en alguna medida, ciertas personas (los hombres, no digo que todos), buscan que su pareja pueda ser tan buena o mejor....
Cuando las cosas no salen como ella quiere, trata de ser a veces tantas persona en un sólo cuerpo; me explico un poco, cuando por desgracia no tenemos un padre, quizás físicamente no, pero ella es quien asume ese papel de una manera tan perfecta y deliciosa que no te das ni cuenta que algo te falta. Hay una propaganda que le hace gran honor, puesto que dice que ella es:
doctora, profesora, madre, secretaria, animadora.... y tantas cosas que se encuentran en una sola persona. Por más que te cueste creerlo, bueno pero hay una cosa que quiero discutir y es un acto que me molesta y desagrada enormemente; que tierno y lindo gesto, es que ella se del tiempo para cuando tu no lo tienes, entre a tu pieza y de una mano para ordenarte algunas cosas.
Pero lo malo es cuando entra y saca todo de su lugar, lo pone en otro lado y luego no sabe donde lo dejo; cuando saca cosas y las tira creyendo o diciendo que es "basura".... ¡Dios!, eso no es basura, son recuerdos, momentos, regalos que la gente que amas te ha hecho y ella las tira como si no fuera nada de nada. Otra cosa es cuando tu no quieres que nadie se te entere de tus notas, las guardas en un lugar que nadie, salvo tu claro, sabe donde se encuentra; pero luego llega tu madre y está en tu pieza te mira y dice "¿por qué no me dijiste que te sacaste, un rojo en la pruena?" y a ti te dan ganas de decirle "Y qué tienes que andar metiendote tu en mi pieza, metete en tus asuntos, no es cosa tuya...." y tantas otras, pero que tienes que tragarte el maldito orgullo o bien las ganas de ser pesado; por que luego dulcemente te das cuenta que todo lo que tu tenías en tu pieza ya no es ni tuya, cambia todo de lugar, saca o pone cosas que se le pegan en ganas y quedas como "yaaaa, okey, ¡Dime dónde dejaste mis cosas ahora!!.
Quien sabe por que lo hacen, pero con ello la verdad de las cosas es que sólo preguntandoles o encarandolas.. sólo de ese modo tener una aclaración. Okey las queremos y todo, pero no me pueden negar que es un acto cruel, malvado y desagradable. Tengan cuidado, pero si pueden usar su voz para decir todo lo que tengan que hacer..... sólo que en su debido momento.
Marisol Alday Derechos de Autor

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