domingo, 29 de abril de 2012

Ojala me puedas perdonar.... no quise hacerte daño


Desde que me mude a esta ciudad, me ha costado el tener que empezar desde cero; no sólo la casa, pieza y lugares nuevo donde se desarrollará mi vida de ahora en adelante; pero por fortuna no tenía que preocuparme tanto por los amigos... no es que sea una total "autista", pero en mi vieja ciudad no tenía amigos y por ende no tenia algún lazo que me uniera a ellos.


Fue en el trayecto de sacar cajas de la mudanza que un chico se me acercó, venía en una bicicleta... tenía una cabellera negra, ojos castaños y una mirada muy cálida que transmitía paz..


- Creo que esto es tuyo- dejó su bicicleta aparte y me tendía con una mano uno de mis cuadernos- creo que se te cayo. 
- Muchas gracias- mis ojos demostraron mezcla de susto y sorpresa, pues era muy reservada respecto al contenido de mis cuadernos- me... me llamo Fernanda ¿y tú?- trataba de ser amable, al menos por cortesía.
- Mucho gusto- dibujo una sonrisa con la que me dejó pasmada- me llamo Rodrigo. Encantado de conocerte.


Bueno nuestro primer encuentro, ya se habrá producido en otros lugares; ya sea en películas hasta en libros, pero lo bueno es que fue verdadero y auténtico... nos ayudó  mi familia y a mi adaptarnos al nuevo lugar. Ya sea cargando las cosas para meterlas en la casa, ordenar y también algunos consejos prácticos; me siento agradecida de tanta amabilidad y fue entonces que por fin encontré, pero también conocí un verdadero amigo con el cual podía contar. 


Nos íbamos juntos al colegio, compartíamos de todo, era algo que no puedo decir que me molestara... todo lo contrario hacia que anhelara un nuevo encuentro con él y mi corazón era quien más se ponía contento; fue un día que estaba en mi pieza haciendo la tarea que mi madre se acercó a mi para decirme las palabras más duras que podría alguien escuchar.


- Preciosa ¿te gusta mucho este lugar cierto?- dijo pasando su mano por mi pelo, señal de que algo delicado íbamos a tener como conversación.
- Me encanta, es algo muy importante para mi; digamos que encontré muchas cosas que valen la pena. Tengo amigos, me siento tan tranquila, es como...
- Mi niña- me interrumpió bruscamente- no quiero que te enojes, pero tengo algo que decirte- la voz le cambió drasticamente haciendo que me empezara a asustar y poner nerviosa- Verás, tu padre... está enfermo y por eso nos.... nos debemos mudar de nuevo, por que este lugar deteriora más su salud. Sé que no es fácil tener que dejar todo lo que has encontrado, dejarlo ser parte de tu pasado. Pero debes entender que es por tu padre.... Nos iremos en 3 días más, sólo tu directora de escuela lo sabe, por eso debes empezar a empacar tus cosas; realmente lo lamento....


Yo no asimilaba cada palabra fue una aguja clavada en mi cuerpo, el frío más intenso se apoderaba de cada sentido y el corazón luchando por seguir latiendo, luego de semejante noticia y daño que me hacían. De acuerdo, mi padre me importaba y mucho... pero tener que empezar todo de nuevo, no me agradaba, podría revelarme a mis padres y decir que me quedaba... pero ¿donde podría ir una joven sola?... Fui a tomar un baño en la tina, para poder despejar un poco mi mente y pensar con claridad; sólo pasaron unos pocos minutos que puse la mano sobre mi corazón y sentí que sus latidos no eran los de siempre... encontré la respuesta que tanto había estado buscando... Yo... ¿podía ser?, sí, estaba enamorada de Rodrigo, pero por desgracia no existiría la posibilidad de hacerle saber lo que significaba para mi; mi corazón lloraba y sólo quería cerrar en ese momento los ojos y al abrirlos despertar de la pesadilla.


Cuando salí me fui hasta mi escritorio y tomé uno de mis cuadernos nuevos, que estaba deseosa de llenar con nuevos mundos, historias y tantas cosas que otros se identificaran; después de todo es la magia que genera el escritor.... Sólo que este tendría un precioso comienzo y un final diferente al planeado y deseado...  No me di cuenta como había pasado el tiempo, tanto que me quedé dormida y era hora de ir a la escuela, decidí disfrutar esos momentos que me quedaban con las personas que me cambiaron tanto la vida y la llenaron de dicha.... Por la tarde volví para empacar las cosas, pero estaba decidida a hacer una última cosa antes de irme.


Me armé de valor, pues había llegado el momento de partir y le dije a mi madre que me esperara en el auto para poder irnos juntas al aeropuerto donde nos esperaba mi padre... cuando llegué a la escuela, lo primero que hice fue recorrer lentamente cada uno de sus pasillos y luego ir por ... última vez a la sala donde pasé tan buenos momentos, pero lo que más me dolía era tener que dejar de sentarme al lado de quien me hizo sentir esto tan hermoso y lleno de alegría mi vida. No tuve el valor suficiente para poder verlo a la cara y por  eso dejé el libro sobre su puesto, esperando que amortiguara un poco la despedida y no me odiara... ya que con el tiempo.... sólo sería una persona más a quien le tomaría poco tiempo dejar en el pasado... y olvidarla. 


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" No esperaba esta decisión ni situación, que el destino se interpusiera y de la nada .... si de la nada tuviera que dejar todo atrás. Tú le diste un sentido a mi vida, espero me perdones por no tener las agallas de poder contarte todo lo que siento por ti en tu cara, ver tus ojos tan dulces y tiernos, sentir el cariño que me cautivo desde ese primer día que llegaste a mi casa y nos diste tu apoyo. Quisiera ser la chica que siempre iba a estar contigo, pero ya lo ves y no pude hacer ni siquiera eso....TE AMO con todo mi corazón, ahora no puedo hacer mucho... descuida no tienes por que recordarme, ya soy parte de tu pasado y de seguro ya ni te acuerdas de mi. Que tengas una hermosa vida, por que te la mereces y quien sabe si algún día nos volvemos a encontrar".
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- Fer... Fer, hija, ya estamos por irnos, sólo nos quedan 15 minutos- me llamaba mi madre- ¿te sientes bien cielo?.
- Sí- mentí- lo estoy, es sólo que me quedé pensando en algo.
- Con tu padre iremos por algo de comer para el camino ¿Quieres algo?.
- Tráeme un poco de chocolate, los espero en la tienda de revistas
- De acuerdo, allí te veremos- y partieron.


Estaba a punto de dar los primeros dos pasos cuando de la nada alguien me tira de un brazo, me da vueltas y besa fuertemente; quedé totalmente sorprendida y helada ante eso... a los pocos segundos me separé y abrí los ojos. Cuando me dí cuenta, por poco y me desmayé de la sorpresa... Eras.... tú.
- ¿A dónde crees que vas?
- Pero... pero ¿tu qué haces aquí?
- No te parece obvio, no dejaré que te vayas así como así.
- Explícate, no entiendo nada de lo que me hablas.
- Simple- volvió a acercarse a mi, tomó mi cintura entre sus manos y me besó; fue tan dulce, sencillo... directo- Sería un completo estúpido si te dejo escapar, verás leí nuestra, sí NUESTRA historia, pero a diferencia del final propuesto por la escritora le tengo algunas modificaciones. La primera es que yo, Rodrigo Te amo con todo el corazón y la locura, no dejaré que otro tipo me quite a la persona que tanto me ha costado encontrar y me llenó el mundo de magia. Segundo no pienso dejarte olvidada en el pasado, cuando sé que eres mi presente y futuro, sin importar donde vayas o lo que hagas estaré contigo para siempre, incluso si eso quiere decir que me vaya contigo... lo que oyes, no te dejaré sola, mi madre debe estar diciéndole a la tuya, que aquí me tienes para lo que sea. Eres mi ángel, musa y encanto con el cual despierto cada mañana... y en unos años más, me gustaría despertara al lado de mi cama con su delicioso aroma y sea la madre de mis hijos.
- ¿Has perdido la cabeza?- no le creía tanta palabra linda.
- Pues si se trata de ir en búsqueda de la persona que amo y me ha hecho volver a la vida mi corazón, entonces se puede decir que si.
- ¿Estás seguro de esto?.
- Tan seguro como que no me arrepiento de haberte encontrado un cuaderno y entregado para así empezar a conversar. Y estoy dispuesto a mucas cosas más... sólo por ti.


Muchos pensamos que los km se suelen interponer entre las relaciones, pero si el sentimiento es puro y fuerte, logra superar muchas cosas.. siendo capaz de ponernos a prueba día a día para conseguir vencer lo mejor, el amor hacia el otro, como si fuera una conquista de todos los día, como la primera vez.


Marisol Alday Derechos de Autor

















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